Santo Domingo.-La Procuraduría Especializada Antilavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo (PEA) y la Fiscalía de La Romana depositaron la medida de coerción contra una presunta estructura criminal dedicada a la estafa electrónica y el lavado de activos, desmantelada en el marco de la Operación Guepardo.
Ante la justicia se presentaron Marisol Nova Nolasco y Rocío del Alba Rodríguez de Moya, mientras que otros dos implicados permanecen prófugos y las autoridades amplían la investigación sobre más miembros de la red delictiva.
El Ministerio Público contabiliza en más de 18 millones de dólares el monto captado por al menos cuatro personas que supuestamente se asociaron para estafar a varios clientes con la venta de proyectos inmobiliarios a través de las empresas Novasco Real Estate S.R.L y RE/MAX ONE.
Loany Lismeiry Ortiz Nova, Yves Alexandre Giroux, Rocío del Alba Rodríguez de Moya y Marisol Nova Nolasco, son los señalados por el órgano acusador.
De acuerdo con el Ministerio Público, el grupo sindicado creó una empresa de nombre Novasco Real Estate, SRL, para la comisión del ilícito y posteriormente adquirió la franquicia de Re/MAX, una agencia de bienes raíces multinacional altamente conocida, y de la que cualquier persona pudiera sentir confianza de acceder, por su alto nivel de credibilidad. Sin embargo, «todo era una farsa, para adquirir clientes, quienes se convirtieron en víctimas de esta red», destaca el organismo de persecución.
La procuradora de corte Ramona Nova Cabrera, titular interina de la Procuraduría Especializada Antilavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo y la fiscal titular de La Romana, Reina Yaniris Rodríguez Cedeño, manifestaron que la investigación ha detectado un «entramado a la perfección», donde publicaban propiedades por redes sociales y recibían transferencias de compradores interesados en Estados Unidos, Puerto Rico y Europa.
En el operativo se incautaron propiedades, vehículos de alta gama, aparatos electrónicos, maquetas, documentación societaria relacionada con el delito investigado, entre otros.
El proyecto fue ampliamente publicitado en redes sociales y páginas web a través de la agencia inmobiliaria RE/MAX ONE, bajo la dirección de Rocío del Alba Rodríguez de Moya.
Según la denuncia, Rodríguez de Moya organizaba reuniones virtuales semanales para presentar el diseño del proyecto y un Máster Plan que incluía 439 apartamentos y penthouses ubicados en Cumayasa, en la Carretera San Pedro-La Romana.
Los querellantes afirman haber invertido un total de 4,018,664.99 dólares en avances, pagos de separación y cuotas para la compra de apartamentos. Según la denuncia, Novasco Real Estate S.R.L. se utilizó para recibir los montos entregados por las víctimas, mientras RE/MAX ONE gestionó la firma de contratos y el seguimiento financiero, lo que generó confianza entre los compradores.


