Santo Domingo.-La Oficina de Atención Permanente del Distrito Judicial de La Romana decidió aplazar para el próximo 18 de febrero la medida de coerción contra dos de los implicados en la operación Guepardo.
Estos individuos están acusados de estafar a decenas de personas en la zona Este del país, con un monto superior a los 18 millones de dólares, a través de empresas inmobiliarias ficticias.
El caso involucra a Marisol Nova Nolasco y Rocío del Alba Rodríguez de Moya, quienes están siendo imputadas por estafa, lavado de activos y asociación de malhechores. En el marco de este esquema fraudulento, los acusados crearon varias empresas inmobiliarias falsas, captando a víctimas que pagaron grandes sumas de dinero por proyectos inexistentes.
Fugados y pruebas comprometedoras
En cuanto a los otros dos implicados, Loany Lismeiry Ortiz y el canadiense Yves Alexandre Giroux, ambos se encuentran prófugos. Ortiz, quien es hija de Rocío Rodríguez, escapó del país en noviembre de 2024, eludiendo el proceso judicial. Giroux, por su parte, lo señalan como el cerebro detrás de este esquema de fraude, junto con su expareja y su suegra.
El Ministerio Público ha presentado una sólida solicitud de medidas de coerción contra Marisol Nova y Rocío Rodríguez, basándose en 284 pruebas entre documentales, testimoniales, periciales, audiovisuales y materiales. Durante los allanamientos realizados, las autoridades encontraron documentos comprometedores en la residencia de Rodríguez, quien había intentado ocultar evidencias relacionadas con el fraude.
El Ministerio Público solicitó 18 meses de prisión preventiva para los detenidos y que el caso se declare como complejo, debido a la magnitud del fraude y la cantidad de pruebas recabadas.


