WASHINGTON.-El presidente Donald Trump anunció que funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. ahora trabajarán en la antigua sede de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), mientras la administración reduce la ayuda exterior y refuerza la aplicación de la ley de inmigración.
Un juez federal aprobó el viernes una de las acciones finales de la administración Trump en su esfuerzo por desmantelar USAID, permitiendo la remoción de miles de empleados de sus puestos tanto en Estados Unidos como en el extranjero.
USAID proporcionaba ayuda humanitaria y de desarrollo en todo el mundo, y las acciones de la administración Trump han dejado miles de millones de dólares de ayuda en el limbo, poniendo fin a programas de salud global que salvan vidas, sistemas de alerta temprana y esfuerzos de seguridad alimentaria.
El presidente y funcionarios de la Casa Blanca han argumentado que el gasto de USAID era derrochador y no estaba alineado con sus políticas de “Estados Unidos Primero”.


