SANTO DOMINGO.- A más de 24 horas de que sucedió la tragedida, en que Suriel Quezada se apersonó a la oficina de Victoriano Durán, ubicada en el sector Las Praderas, en el Distrito Nacional, y lo mató de un disparo en el pecho; luego se suicidó con un disparo en la sien, las preguntas se multiplican sin respuestas claras tras el homicidio- suicidio.
El llanto de Raquel se escuchaba hoy muy temprano desde las afueras del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif). Apenas puede hablar. Entre sollozos, se aferra a los recuerdos de su esposo, Eduardo Antonio Victoriano Durán, el abogado que perdió la vida en un hecho que ha estremecido a todos los que lo conocieron.
«Él era un buen hombre, muy dedicado… sobre todo en su trabajo y con su familia», logra decir entre lágrimas. «Donde quiera que llegaba, la gente lo quería».
- Suriel Quezada, de 57, un exdirector municipal de Tireo, provincia La Vega, luego se quitó la vida. El motivo sigue siendo un misterio para los familiares de ambos.
Mientras Raquel expresa su dolor, Richard Victoriano Durán trata de mantenerse fuerte. Su rostro refleja la tristeza de la pérdida inesperada de su hermano Eduardo.
Con su voz entrecortada, agrega que su hermano era abogado, auditor, contable y muy amigable.
Las preguntas se multiplican sin respuestas claras. Richard y su familia no comprenden cómo dos amigos de toda la vida terminaron envueltos en una tragedia así.
Raquel, destrozada, intenta encontrar fuerzas para mantenerse de pie.
La tragedia deja a dos familias sumidas en el sufrimiento, con preguntas sin responder y el peso de una ausencia irreparable.
Suriel Quezada se apersonó a la oficina de Victoriano Durán, ubicada en el sector Las Praderas, en el Distrito Nacional, y lo mató de un disparo en el pecho; luego se suicidó con un disparo en la sien.
El vocero de la Policía Nacional, Diego Pesqueira, informó que el hecho ocurrió alrededor de las 11:30 de la mañana y que se investiga el móvil del trágico suceso.


