MOSCU.-El enviado estadounidense Steve Witkoff y el presidente ruso Vladimir Putin mantuvieron el viernes en Moscú conversaciones «constructivas» que duraron tres horas, según un asesor de Putin.
Yuri Ushakov dijo que la posibilidad de que Rusia y Ucrania reanuden las conversaciones directas fue un punto particular de discusión.
Estados Unidos no ha publicado detalles de lo que se discutió durante la reunión, pero después el presidente Donald Trump dijo que el trabajo para lograr un acuerdo de paz entre las dos partes estaba avanzando «sin problemas».
Mientras tanto, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha instado a los aliados a aplicar más presión sobre Rusia, culpando a Moscú por no aceptar un alto el fuego temporal previo presentado por Estados Unidos.
El tráfico se detuvo cuando un convoy de automóviles que transportaba a Witkoff llegó al centro de Moscú, en su cuarta visita a Rusia desde principios de año.
Las conversaciones de tres horas fueron calificadas de «constructivas y muy útiles» por el asesor de Putin, Ushakov.
«Esto ha acercado las posiciones rusas y estadounidenses no sólo respecto de Ucrania sino también sobre una serie de otros temas internacionales», dijo.
«En particular, sobre la crisis ucraniana, se discutió la posibilidad de reanudar las negociaciones directas entre representantes rusos y ucranianos», añadió.
A principios de esta semana, Putin señaló por primera vez desde las primeras etapas de la guerra que estaba abierto a dialogar con Zelensky.
Se cree que sus comentarios respondieron a una propuesta del presidente ucraniano de extender la tregua de Pascua de 30 horas por 30 días. Aún no se ha acordado ninguna tregua.
Kiev ha estado recibiendo creciente presión de Trump para que acepte concesiones territoriales como parte de un acuerdo con Moscú para poner fin a la guerra.
La cuestión de la península de Crimea ocupada, anexada ilegalmente por Rusia en 2014, se ha convertido en un punto especialmente polémico.
Zelensky ha rechazado repetidamente la idea de reconocer a Crimea como parte de Rusia, y el viernes declaró a los periodistas en Kiev: «Nuestra posición no ha cambiado: solo el pueblo ucraniano tiene derecho a decidir qué territorios son ucranianos».
Sin embargo, en comentarios posteriores sugirió a la BBC que se podrían discutir «cuestiones territoriales» si se acordaba un «alto el fuego total e incondicional».
«Un alto el fuego total e incondicional abre la posibilidad de discutir todo», dijo.
También hizo referencia a unos comentarios hechos por Trump en una entrevista con la revista Time , en la que el presidente estadounidense dijo que «Crimea se quedará con Rusia».
«Lo que dice el presidente Trump es cierto, y estoy de acuerdo con él en que hoy no tenemos suficientes armas para recuperar el control de la península de Crimea», afirmó Zelensky.
El plan de paz de Estados Unidos no se ha hecho público, pero hay informes que sugieren que propone que Rusia conserve la tierra que ha ganado, que equivale aproximadamente al 20% del territorio de Ucrania, una condición que favorece a Moscú.
Según la agencia de noticias Reuters, que vio las propuestas estadounidenses entregadas a los funcionarios europeos la semana pasada, así como contrapropuestas posteriores de Europa y Ucrania, existen disparidades significativas entre ellas.
El acuerdo con EE.UU. ofrece a Estados Unidos la aceptación legal de la anexión ilegal de Crimea por parte de Rusia y un reconocimiento de facto del control ruso de otras áreas ocupadas, incluida toda la región de Luhansk.
Por el contrario, los europeos y los ucranianos sólo discutirán lo que sucederá en el territorio ucraniano ocupado después de que entre en vigor un alto el fuego.
Mientras se desarrollaba la reunión entre Witkoff y Putin, Trump afirmó que las conversaciones iban en la dirección correcta.
«Se están reuniendo con Putin ahora mismo, mientras hablamos, y tenemos muchas cosas en marcha, y creo que al final vamos a lograr muchos buenos acuerdos, incluidos acuerdos arancelarios y comerciales», dijo a los periodistas en Estados Unidos.
Dijo que su objetivo era poner fin a los combates en Ucrania que se cobraban las vidas de 5.000 ucranianos y rusos cada semana, y agregó que creía que «estamos muy cerca» de un acuerdo de paz.
Más tarde, en un artículo publicado en Truth Social, Trump afirmó que Zelensky no había firmado «los documentos finales del muy importante Acuerdo sobre Tierras Raras con Estados Unidos».
«Lleva al menos tres semanas de retraso», dijo, añadiendo que esperaba que se firmara «inmediatamente».
El tan esperado acuerdo sobre minerales, que daría a Estados Unidos una participación en los abundantes depósitos de recursos naturales de Ucrania, debía firmarse en febrero, pero se frustró después de una tensa reunión entre Trump y Zelensky en Washington.
Las posiciones de Rusia y Ucrania para alcanzar un acuerdo de paz todavía parecen estar muy alejadas, y ningún representante de Ucrania ha sido invitado a participar en las conversaciones en Moscú.
El viernes, en las redes sociales, Zelensky criticó a Rusia por no aceptar un alto el fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos el 11 de marzo e instó a los aliados a aplicar más presión.
«Han pasado 45 días desde que Ucrania aceptó la propuesta del presidente Trump de paz en el cielo, el mar y el frente», declaró. «Rusia rechaza todo esto. Sin presión, esto no se puede resolver. Es necesario presionar a Rusia».
Dijo que a Rusia se le estaba permitiendo importar misiles de países como Corea del Norte, que luego utilizó en un mortal ataque con misiles en Kiev el jueves, que mató a 12 personas.
La insuficiente presión sobre Corea del Norte y sus aliados les permite fabricar este tipo de misiles balísticos. El misil que mató a los residentes de Kiev contenía al menos 116 piezas importadas de otros países, y la mayoría, lamentablemente, fueron fabricadas por empresas estadounidenses, afirmó Zelenski.
Tras el ataque a Kiev, Trump dijo que estaba «ejerciendo mucha presión» sobre ambos bandos para poner fin a la guerra, y se dirigió directamente a Putin en una publicación en las redes sociales, diciendo: «¡Vladimir, ALTO!».
Desde entonces, sin embargo, Trump ha culpado a Kiev de iniciar la guerra, diciendo a la revista Time: «Creo que lo que causó que la guerra comenzara fue cuando ellos [Ucrania] comenzaron a hablar de unirse a la OTAN».
Antes de las conversaciones entre Witkoff y Putin el viernes, un alto general ruso murió en un atentado con coche bomba en la capital rusa. El Kremlin acusó a Ucrania de ser responsable. Kiev no ha hecho comentarios.
Dos personas también murieron en un ataque ucraniano contra la región rusa de Bélgorod, según informó el gobernador local. Ucrania tampoco ha hecho comentarios al respecto.
