LOS ÁNGELES. -Estrellas de Hollywood, sindicatos y fanáticos han criticado a la cadena ABC, propiedad de Disney, por su decisión de suspender «indefinidamente» el programa Jimmy Kimmel Live! tras la presión ejercida por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) luego de los comentarios del presentador sobre Charlie Kirk.
Kimmel criticó a los republicanos y al movimiento MAGA en su monólogo del lunes por la noche, y ABC anunció el miércoles que suspendería el programa, horas después de que el presidente de la FCC, Brendan Carr, amenazara con “tomar medidas”.
La suspensión fue elogiada por el presidente, Donald Trump, y otros republicanos. Pero Hollywood, donde Kimmel es popular por ser un presentador habitual de premios importantes como los Oscar y los Emmy, ha salido en su defensa.
“Esto no está bien”, dijo el actor y comediante Ben Stiller en una publicación en la red social X. La actriz Jamie Lee Curtis, que había hablado con emoción sobre la muerte de Kirk, compartió una imagen de Kimmel y una cita de apoyo en Instagram.
La comediante Wanda Sykes también precisó en un video de Instagram que, aunque Trump no había logrado poner fin a las guerras en Gaza o Ucrania, “sí que acabó con la libertad de expresión en su primer año” de regreso a la Casa Blanca.
La actriz Jean Smart compartió una foto suya con Kimmel en Instagram y afirmó que estaba “horrorizada” por la cancelación del programa.
“Lo que dijo Jimmy fue libertad de expresión, no discurso de odio. La gente parece querer proteger la libertad de expresión solo cuando le conviene a su agenda”, acotó.
El comediante Michael Kosta, uno de los presentadores del programa The Daily Show de la cadena Comedy Central, aseguró el miércoles por la noche en una historia de Instagram: “Este es un momento grave en la historia de Estados Unidos. Las cadenas de televisión deben oponerse. Esto es una completa tontería”.
Los sindicatos que representan a escritores y actores —el Sindicato de Guionistas de Estados Unidos, la Federación Estadounidense de Músicos y el Sindicato de Actores de Cine y Televisión-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión— condenaron la suspensión indefinida del programa, catalogándola como un ataque a la libertad de expresión.
Tommy Williams estaba a punto de entrar para ver el rodaje de la edición del miércoles del programa de Kimmel, cuando descubrió que había sido cancelado.
“Esperaron para desconectarlo justo cuando el público del estudio estaba a punto de entrar”, declaró a la agencia de noticias The Associated Press. Afirmó que no estaba al tanto de los comentarios de Kimmel sobre Kirk.
“Entonces fui a ver cuáles eran esos comentarios y realmente no me parecieron justificados las acciones. Me pareció un poco extremo”, añadió.
La Fundación para los Derechos Individuales y la Expresión (FIRE), una organización sin fines de lucro con sede en Philadelphia, indicó el miércoles que el presidente de la FCC, Brendan Carr, había abusado de su cargo y había invocado falsamente el criterio del interés público para “atacar selectivamente el discurso que no le gusta al Gobierno”.
FIRE también dijo en X: “El Gobierno presionó a ABC, y ABC cedió”.
La indignación por la decisión de ABC podría extenderse a las calles este jueves por la tarde, cuando se espera una protesta frente al El Capitan Entertainment Center de Hollywood, donde se graba Jimmy Kimmel Live!. La protesta está siendo organizada por el grupo Refuse Fascism.
«Un comportamiento corrupto»
La noticia de la suspensión del programa provocó una cascada de reacciones en Estados Unidos.
El líder demócrata en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, difundió un comunicado firmado por otros dirigentes de su partido en el que denunció lo ocurrido con Kimmel como «un abuso de poder».
En la misma línea, el expresidente Barack Obama dijo en X que «tras años quejándose de la cultura de la cancelación, la administración actual la ha llevado a un nuevo y peligroso nivel al amenazar rutinariamente con acciones regulatorias contra los medios a menos que silencien o despidan a los reporteros y comentaristas que no le gustan».
Y añadió: «Este es precisamente el tipo de coerción gubernamental para el que se diseñó la Primera Enmienda», en referencia a la enmienda de la Constitución de Estados Unidos que garantiza la libertad de expresión.
La oficina del gobernador de California, Gavin Newsom, que se viene perfilando como uno de los más activos opositores a Trump entre los demócratas, criticó la decisión de ABC, diciendo que es «un comportamiento corrupto, despreciable y cobarde» y «un esfuerzo coordinado para controlar a los medios».
En su cuenta personal, el gobernador añadió: «Comprar y controlar plataformas mediáticas. Despedir comentaristas. Cancelar programas. No son coincidencias. Es un acto coordinado. Y es peligroso. El Partido Republicano no cree en la libertad de expresión. Te están censurando en tiempo real».
Otro demócrata, el congresista Robert García, miembro del Comité de la Cámara de Representantes de Supervisión y Reforma del Gobierno, anunció que impulsará una investigación parlamentaria sobre lo que calificó como parte de «los esfuerzos para censurar la oposición al presidente».
«No nos callaremos mientras nuestras libertades están amenazadas por corruptelas e intimidaciones. Cualquiera que sea cómplice tendrá que responder ante nosotros», dijo García.
Por su parte, el congresista demócrata Brad Sherman, quien representa a la ciudad californiana de Burbank, donde se encuentra una parte importante de la industria televisiva de EE.UU., dijo en un mensaje en Bluesky que «todo el poder del gobierno federal, incluida la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones), se está utilizando para silenciar a todas las voces excepto la de MAGA».
Sherman dijo que la Primera Enmienda de la Constitución de EE.UU. protege la libertad de expresión de represalias gubernamentales, «incluso si es incorrecta».
Mientras, el gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, escribió en X que «una sociedad libre y democrática no puede silenciar a los comediantes porque al presidente no le guste lo que dicen».
«Esto es un ataque a la libertad de expresión y no se puede permitir que siga así. Todos los funcionarios electos deben alzar la voz y oponerse a este acto antidemocrático», dijo el mandatario demócrata.
