NUEVA YORK.-El Gobierno de la ciudad de Nueva York presentó una demanda ayer viernes en contra de la Administración de Donald Trump argumentando que le quitaron «sin aviso ni explicación» más de 80 millones de dólares en fondos que habían sido designados por el Congreso para las autoridades neoyorquinas.
Los fondos fueron otorgados a Nueva York mediante la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) para que la ciudad costeara el pago de alojamiento, servicios y más para personas migrantes que fueron procesadas por el Departamento de Seguridad Nacional antes de terminar en la Gran Manzana en lo que se resuelven sus casos.
Pero a inicios de este mes, según la demanda, ese financiamiento fue retirado de manera abrupta. «Pese al hecho de que FEMA había revisado y aprobado las solicitudes afines de la ciudad, y emitido los pagos, los acusados agarraron el dinero sin ninguna consideración por los procesos administrativos adecuados», dice la demanda, presentada contra Trump, el Departamento del Tesoro y el Departamento de Seguridad Nacional.
Este retiro sucedió poco después de que el multimillonario Elon Musk, que es parte clave del así llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental o DOGE, dijera equivocadamente que FEMA estaba realizando este gasto de manera supuestamente ilegal y que ese dinero presuntamente había sido sacado de fondos para desastre.
Musk también dijo, sin evidencia, que el dinero estaba siendo gastado para que las personas migrantes se alojaran en supuestos hoteles de lujo.
En realidad, el dinero no es de los fondos de ayuda en casos de desastres sino parte de un programa cuyo presupuesto fue previsto por un voto en el Congreso y destinado para apoyar a Gobiernos locales que ayudan a gente sin ciudadanía soltada por autoridades de inmigración en lo que su caso migratorio se determina.
El alojamiento de las personas inmigrantes en Nueva York mediante este programa tampoco ha sido en hoteles de lujo, a decir del alcalde Eric Adams e informes de contralorías, y solo alrededor de 19 millones de dólares (o sea una quinta parte del fondo total dado a la ciudad) había sido usado para reembolsos por gastos de hospedajes en hoteles.
Lo demás ha sido para temas como movilización de oficiales de seguridad, comida y otros servicios.
Adams dijo en un comunicado que su Gobierno «con muy poca ayuda de las autoridades federales» ha intentado gestionar «una crisis sin precedentes» por la llegada de personas migrantes procesadas por DHS y que los «80 millones de dólares que FEMA aprobó, desembolsó y luego retiró pese a que la cuidad ya ha gastado más de 7,000 millones de dólares en los últimos tres años para esto es el mínimo que merecen nuestros contribuyentes».
«Ningún procedimiento legal les permite a los señalados hacer como hicieron aquí y quitar subvenciones que ya habían sido aprobadas sin bases legítimas», indica la demanda presentada por la ciudad de Nueva York.
«Como los acusados tomaron una medida extraordinaria y no legal de confiscar el dinero de la cuenta bancaria de la ciudad, por sorpresa y sin aviso, la ciudad pide un alivio extraordinario para que el dinero sea retornado», dicen los demandantes en su solicitud al juez.
El Gobierno de Trump no se ha pronunciado ni hecho comentarios respecto a la demanda del Gobierno local de Nueva York.


