Es necesario que el CDP rinda cuentas y sea auditado, no como cuestionamiento, sino como certificación de que se está funcionando bien”, sostiene. Para él, el primer paso es fortalecer los organismos internos que la ley dispone, de modo que el gremio pueda tener la capacidad de defender externamente a sus miembros.

La misión inicial del Colegio, dignificar el ejercicio profesional, garantizar bienestar social y promover la formación recuerda Peña, se ha desdibujado. Hoy el gremio enfrenta una disyuntiva: renovarse o morir.

Reorganización

Para recuperar incidencia social, Peña plantea dos tareas esenciales: reorganizar el CDP, con transparencia y democratización en las decisiones y modernizarlo para adaptarse al nuevo escenario mediático.

“La ecología digital es muy distinta a la de hace 30 años. El CDP debe flexibilizarse y atraer a los jóvenes periodistas que no se sienten representados por el gremio”,

En su criterio, el Colegio ha perdido el rumbo y se ha diluido en el gremialismo y el sindicalismo, olvidando su verdadero rol: la defensa de la profesión. Su propuesta es volver al centro de la misión, con énfasis en la ética y la diferenciación entre periodistas formados académicamente y simples opinadores o influencers.

Periodismo digital

El entrevistado entiende que las redes sociales ofrecen una oportunidad para fortalecer la identidad profesional. “Hoy más que nunca el Colegio tiene un nicho: diferenciar al periodista colegiado del opinador irresponsable”, enfatiza.

Sugiere que el CDP impulse programas de fact-checking, diplomados y maestrías que proporcionen herramientas para detectar noticias falsas en texto, audio, foto y video.

Recuerda que ya hubo experiencias exitosas con universidades y el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Mescyt), que permitieron maestrías en comunicación y un doctorado con la Universidad APEC (Unapec), así como talleres impulsados por Google, la Universidad O&M y la Fundación Maldita en verificación de datos y detección de noticias falsas. A su juicio, el CDP debería institucionalizar y dar continuidad a esas alianzas, ampliarlas y garantizar que cada nueva generación de periodistas tenga acceso a estas herramientas para fortalecer la credibilidad y el rigor profesional.

Formación y memoria

Para Peña, el CDP debe también producir conocimiento: publicar investigaciones, rescatar trayectorias de los Premios Nacionales de Periodismo y crear colecciones de referencia. “Eso serviría de inspiración a los jóvenes y ayudaría a reconectar con su base”, afirma.

Otro aporte que no debe perderse, señala, es la propia ley de creación del Colegio, aunque requiere actualización. “La norma establece que el 0.5 % de la publicidad debe ir al CDP, pero eso nunca se ha cumplido. Aun así, esa estructura le da protección al ejercicio profesional”, explica.

Mensaje a nueva directiva

Como recomendación a los nuevos incumbentes del Colegio, el veterano maestro exhorta: “Que lo renueven, lo reorganicen y lo hagan más transparente. Que democraticen la toma de decisiones y elaboren un plan de desarrollo y recuperación. El CDP es el instrumento sine qua non de los periodistas. Sin plan no hay futuro”.

Periodista con casi 27 años de experiencia. Licenciada en Comunicación Social con maestría en Ciencias Políticas para el Desarrollo Democrático. Correctora de estilo, locutora, maestra de ceremonias.