PALM BEACH, EE.UU.— El presidente Donald Trump insistió el domingo que Ucrania y Rusia están «más cerca que nunca» de un acuerdo de paz mientras recibía al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy en su resort de Florida, pero reconoció que las negociaciones son complejas y aún podrían fracasar, dejando la guerra prolongándose durante años.
Las declaraciones del presidente se produjeron después de que los líderes se reunieran para conversar tras lo que Trump calificó como una «excelente» conversación telefónica de dos horas y media con el presidente ruso, Vladimir Putin, cuya invasión de Ucrania desencadenó la guerra hace casi cuatro años. Trump insistió en que creía que Putin aún deseaba la paz, incluso cuando Rusia lanzó otra ronda de ataques contra Ucrania mientras Zelenski volaba a Estados Unidos para la última ronda de negociaciones.
«Rusia quiere ver a Ucrania triunfar», declaró Trump durante una conferencia de prensa al final de la tarde, junto a Zelenski tras su reunión. Elogió repetidamente a su homólogo, calificándolo de «valiente».
Zelenski afirmó que Trump había acordado recibir de nuevo a líderes europeos, posiblemente en la Casa Blanca, en algún momento de enero. Trump indicó que la reunión podría ser en Washington o en algún otro lugar.
Zelenski agradeció a Trump por su labor. «Ucrania está lista para la paz», afirmó.
Trump y Putin volverán a hablar
Trump dijo que, tras la reunión, mantendría otra llamada con Putin. Horas antes el domingo, el asesor de asuntos exteriores de Putin, Yuri Ushakov, afirmó que la llamada entre Trump y Putin fue iniciada por la parte estadounidense y fue «amistosa, benévola y formal». Ushakov añadió que Trump y Putin acordaron volver a hablar «sin demora» tras la reunión de Trump con Zelenski.
Pero Ushakov añadió que se necesita una “decisión política audaz y responsable de Kiev” sobre la ferozmente disputada región del Donbás en el este de Ucrania y otros asuntos en disputa para que haya un “cese completo” de las hostilidades.
Ambos líderes identificaron la decisión sobre el futuro de la región del Donbass como un importante punto de fricción.
Trump afirmó que las partes estaban cada vez más cerca de un acuerdo. «Es un asunto muy complejo, pero creo que se resolverá», afirmó.
Zelenski dijo: «Nuestra postura es muy clara. Por eso el presidente Trump dijo que este es un asunto muy difícil y, por supuesto, tenemos posturas diferentes con Rusia al respecto».
Trump dijo, sin embargo, que todavía cree que Putin es «muy serio» acerca de poner fin a la guerra, incluso mientras Rusia continúa atacando objetivos en Ucrania mientras Zelenskyy viaja a los EE. UU. Trump dijo: «Creo que Ucrania también ha realizado algunos ataques muy fuertes».
Sostuvo que aún existe la posibilidad de que las negociaciones fracasen.
“En unas semanas, creo que lo sabremos”, dijo Trump. “Podríamos tener algo en lo que un punto en el que no se está pensando sea importante y lo fragmente. Mire, ha sido una negociación muy difícil. Muy detallada”.
Durante las recientes conversaciones, Estados Unidos acordó ofrecer a Ucrania ciertas garantías de seguridad similares a las ofrecidas a otros miembros de la OTAN. La propuesta surgió después de que Zelenski se declarara dispuesto a retirar la solicitud de su país de unirse a la alianza de seguridad si Ucrania recibía una protección similar a la de la OTAN, diseñada para protegerla de futuros ataques rusos.
Se avecinan semanas ‘intensas’
Zelenski también habló el día de Navidad con el enviado especial estadounidense Steve Witkoff y Jared Kushner, yerno de Trump. El líder ucraniano afirmó que discutieron «ciertos detalles sustanciales» y advirtió que «aún queda trabajo por hacer en temas delicados» y que «las próximas semanas también podrían ser intensas».
El presidente estadounidense ha trabajado para poner fin a la guerra en Ucrania durante gran parte de su primer año en el cargo, mostrando irritación tanto con Zelenski como con Putin, aunque reconociendo públicamente la dificultad de poner fin al conflicto. Atrás quedaron los días en que, como candidato en 2024, se jactaba de poder resolver los combates en un día. De hecho, el domingo, Trump se refirió en repetidas ocasiones a la complejidad de las negociaciones.
Después de recibir a Zelenskyy en la Casa Blanca en octubre , Trump exigió que tanto Rusia como Ucrania detuvieran los combates y “se detuvieran en la línea de batalla”, lo que implicaba que Moscú debería poder conservar el territorio que ha confiscado a Ucrania.
Zelenskyy dijo la semana pasada que estaría dispuesto a retirar tropas del corazón industrial del este de Ucrania como parte de un plan para poner fin a la guerra, si Rusia también se retira y el área se convierte en una zona desmilitarizada monitoreada por fuerzas internacionales.
Putin quiere que Rusia conserve sus logros y más
Putin ha declarado públicamente su deseo de que todas las zonas de cuatro regiones clave capturadas por sus fuerzas, así como la península de Crimea, anexionada ilegalmente en 2014, sean reconocidas como territorio ruso. También ha insistido en que Ucrania se retire de algunas zonas del este de Ucrania que las fuerzas de Moscú no han capturado. Kiev ha rechazado públicamente todas estas exigencias.
El Kremlin también quiere que Ucrania abandone su intento de unirse a la OTAN. Advirtió que no aceptará el despliegue de tropas de miembros de la alianza militar y que las considerará un «objetivo legítimo».
Putin también ha dicho que Ucrania debe limitar el tamaño de su ejército y dar estatus oficial al idioma ruso, demandas que ha hecho desde el comienzo del conflicto.
Ushakov dijo al diario económico Kommersant este mes que la policía y la guardia nacional rusas permanecerían en partes de Donetsk –una de las dos principales áreas, junto con Luhansk, que conforman la región del Donbass– incluso si se convierten en una zona desmilitarizada bajo un posible plan de paz.
Ushakov advirtió que intentar llegar a un acuerdo podría llevar mucho tiempo. Aseguró que las propuestas estadounidenses que contemplaban las demandas rusas se habían visto «empeoradas» por las modificaciones propuestas por Ucrania y sus aliados europeos.
Trump ha sido algo receptivo a las demandas de Putin, argumentando que se puede persuadir al presidente ruso para que ponga fin a la guerra si Kiev acepta ceder territorio ucraniano en la región del Donbas y si las potencias occidentales ofrecen incentivos económicos para que Rusia vuelva a la economía global.
