WASHINGTON.-Se espera que el presidente, Donald Trump, firme este jueves una orden ejecutiva para cerrar el Departamento de Educación, cumpliendo así la promesa que hizo hace años de desmantelar la agencia federal, según ha confirmado la Casa Blanca.
Trump celebrará un acto en la Casa Blanca para firmar la orden que instruye a la secretaria de Educación, Linda McMahon, a «tomar todas las medidas necesarias para facilitar el cierre del Departamento de Educación y devolver la autoridad educativa a los estados, sin dejar de garantizar la prestación efectiva e ininterrumpida de los servicios, programas y prestaciones de los que dependen los estadounidenses».
McMahon ha tomado recientemente medidas para reducir drásticamente el tamaño del Departamento de Educación.
De manera similar, McMahon prometió en su audiencia de confirmación en el Senado trabajar con el Congreso para promover el plan de Trump de desmantelar el departamento. A principios de este mes, envió un correo electrónico a los empleados en el que anunciaba que se avecinaban cambios importantes.
“Nuestro trabajo es respetar la voluntad del pueblo estadounidense y del presidente que eligieron, quien nos ha encomendado la tarea de lograr la eliminación de la burocracia aquí en el Departamento de Educación, una misión final trascendental, de manera rápida y responsable”, escribió según una copia de la orden obtenida por NBC News.
El Departamento de Educación es uno de los departamentos federales de menor tamaño en el Gabinete. Sus 268,000 millones de dólares en fondos asignados el año pasado representaron el 4% del presupuesto de todo el Gobierno federal.
El departamento no dicta los planes de estudio utilizados en las aulas. Se trata en gran medida de una organización de financiación y de defensa de los derechos civiles, que distribuye dinero a las escuelas con altas tasas de estudiantes pobres y para ayudar a los niños con discapacidades.
La orden ejecutiva de Trump ordenará a McMahon que se asegure de que los fondos de la agencia no se destinen a programas o actividades que promuevan la diversidad, la equidad y la inclusión o la «ideología de género».
El Departamento de Educación anunció la semana pasada que investigará a más de 50 universidades a las que acusa de “participar en prácticas de exclusión racial en sus programas de postgrado”.
Las prácticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI, en inglés) son una etiqueta muy utilizada que se aplica a los esfuerzos por mejorar la cultura del lugar de trabajo y crear más oportunidades para los grupos desfavorecidos, y no son intrínsecamente discriminatorias.
La presidenta de la Asociación Nacional de Educación, Becky Pringle, declaró en un comunicado este miércoles que el esfuerzo de Trump por cerrar el Departamento de Educación podría tener implicaciones desastrosas para los estudiantes de todo el país.
Acusó a Trump y a Elon Musk, el jefe de facto del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, en inglés), de apuntar “su bola de demolición contra las escuelas públicas y al futuro de los 50 millones de estudiantes de comunidades rurales, suburbanas y urbanas de todo Estados Unidos para pagar las dádivas fiscales a los multimillonarios”.
McMahon afirmó la semana pasada que al menos tres empleados de DOGE habían estado auditando el Departamento de Educación.
Trump ha prometido desde hace mucho desmantelar el Departamento de Educación, y mencionó la idea por primera vez durante su primer mandato, además de hacer campaña con esa promesa durante las elecciones de 2024. Ha sugerido que los estados deberían hacerse cargo de la administración de los temas educativos y que la gestión de la política de educación y las responsabilidades actuales de la agencia, como la supervisión de los préstamos federales para estudiantes, podrían ser absorbidas por otras partes del Gobierno federal.




