SANTO DOMINGO.-Desde tempranas horas de este martes, comunitarios del sector Zambrana, en la provincia Sánchez, se lanzaron a las calles en protesta para impedir que equipos de la empresa minera Barrick Gold corten árboles en la cabecera del río El Naranjo.
De acuerdo con los manifestantes, un contingente militar acompañado de equipos pesados incluyendo grúas y retroexcavadoras intentó ingresar a la zona para desmontar parte de la capa boscosa. En respuesta, niños, jóvenes y adultos se acostaron en el suelo formando una barrera humana para impedir el paso de la maquinaria.
“Miren cómo está la Barrick Gold aquí pisoteando a los comunitarios, metiendo maquinarias donde los niños están atemorizados”, denunció Bernardo Paulino, dirigente comunitario del sector Zambrana. Añadió: “Miren cómo están las personas postradas en la calle para que Barrick Gold los mate; total, ellos lo van a hacer con esa presa que están construyendo”.
Cotuí, República Dominicana
La protesta ocurre en medio de un clima de tensión que se ha mantenido en la comunidad desde el pasado 8 de enero, fecha desde la cual se ha reportado la presencia diaria de fuerzas militares en el área, acompañando a los equipos que realizan trabajos en la zona del río.
En semanas recientes, líderes comunitarios han denunciado la destrucción de árboles en la zona protegida, lo que ha intensificado la indignación entre los residentes. Desde finales de enero, una comisión encabezada por el Defensor del Pueblo y el obispo de La Vega, junto a otras instituciones, ha intentado mediar entre la empresa minera y los comunitarios, sin que hasta el momento se haya alcanzado un acuerdo, debido a que los residentes de allí se oponen a la construcción de la presa de cola por parte de la minera, que de por si ya ha contaminado con los desechos tóxicos los ríos y de construirse los efectos serían catastróficos que tendría un posible colapso de la misma, que podría afectar a comunidades cercanas, incluyendo Nagua.

Los habitantes de la zona han presentado estudios técnicos que alertan sobre estos riesgos, pero hasta ahora no han recibido respuestas satisfactorias de la empresa ni del Gobierno.


